incognitas matutinas...

a veces es inevitable comparar... y es que, sabemos pues, es una habilidad primaria para el desarrollo del "yo" social... honestamente, no me gusta compararte... es un miedo latente mientras estoy sentado junto a tí, y tu solo resuelves contar los lunares en mi cara de una manera "discreta"... es como un estimulo reflejo, aun a sabiendas de que las consecuencias de ello siempre pueden ser un "tonto" dicho por tu boca, con cierto déjo de broma si, pero aun hiriente desde un punto de vista un tanto infantil - el tono en el que mejor entendemos tu y yo - ... y es que seguramente se me nóte, pues siempre intento evadir esas preguntas del tipo de "oye, y tu que harias si....?"... la realidad de fondo es que reconosco en tí demasiados rasgos de alguien a quien alguna vez amé, alguien a quien pedí lo que nunca a alguien le había pedído y que nunca - despues de ella - he vuelto a pedir... por una parte, es doloroso el hecho de notar como a veces gesticulas, pues inmediatamente me remíto a esos viejos días de levantarse hasta tarde, hacer el amor hasta las media tarde, salir a "cazar" algo de comer y ver peliculas en el viejo sillon... una que otra mirada tuya me pierde en las profundidades de el vago recuerdo de sus ojos antes de irnos a dormir... aunque, lo peor sigue siendo tu risa... tu risa me hace caer en la cuenta de que eres otra persona, y no la que solía mirar detras de las sabanas rojas y grises durante las calurosas noches de ese verano perdido en mi memoria... aunque, con todo y eso, debo admitir que tus carcajadas me llenan de una alegria especial, aun muy deprimido - afortunadamente no lo notas (o al menos no lo dices) - me dibujas espontaneas lineas en los bordes de mi boca... en eso quizas, seas diferente a esa persona del pasado - de mí pasado - ... en eso quizas, seas "mejor" que esa persona... el caso es que, esta situacion atenta contra mi implacable sentido de justicia poetica... para mi no es válido quererte como yo te quiero solo porque me recuerdas a alguien que yá fué... te juro, querida, que me siento la persona más ruin y maldita de toda la creacion y puntos circunvecinos - aunque debo agregar que ese sentimiento me és (la mayoria de las veces, salvo excepciones "excepcionales") inócuo e indiferente - , ampliando el horizonte de cosas por las que me siento culpable... pero alguien ajeno pensaría que tu compañia es una experiencia dolorosa y masoquista... pero no... quizas solo convendria recalcar el hecho de que me ayudas a darme cuenta cuanto he dejado atras esos recuerdos... me ayudas a progresar en el adios de todas esas pesadas cargas emocionales... dicen, acertadamente, que poder desir adios es crecer... tu eres fundamental en ese crecimiento que, alguna vez, pensé que ya tenía... pero, una duda me salta, como liebre intentando evitar al tiro de la escopeta... sera posible que todo ese cariño que te tengo sea por tu parecido con esa mujer de mí pasado, o habra la posibilidad de que sea algo "esencial" de mi persona?.. es decir, mi eleccion es producto de los incontables recuerdos acumulados y que no he dejado ir porque siguen alegrando mia mañanas, o de la expresion de mi conciencia que busca satisfacer todas las necesidades de mi roto corazon?..